Tu Carta, más auténtica, a los Reyes Magos !!

Este año te invito a escribir tu carta más auténtica a sus Majestades los Reyes Magos de Oriente.

Y ojo, que funciona, siempre y cuando lleve la dosis adecuada de inocencia y confianza.

La carta sincera, sólo para valientes, tendrá una única petición:

Que te muestre todo aquello que te hace daño y no quieres ver !!

Uhhhh…!!

– ¿Pero de qué va esto? Te estarás preguntando. » Si estamos en Navidad, luces de colores, turrón de chocolate, paz y alegría»

Pues justamente va de esto, de paz y alegría, de verdad de la buena.

A lo largo de los más de 10 años que vengo ejerciendo como terapeuta, me he encontrado muchos casos de personas para las que todo iba bien. Y estaría perfecto y sería creíble si no tuvieran enfermedades importantes que no son más que llamadas de atención. O situaciones recurrentes en su vida que indican que algo no va tan bien.

Mirar hacia aquello que no está bien, que nos ha hecho daño y hemos guardado, enmascarado, es vital y básico para la paz y la alegría de la Navidad y de todo el año.

Hacernos responsables de nuestro bien estar !! Hacernos responsables del dolor escondido y los duelos no realizados!! Hacernos responsables de nuestras máscaras !!

Cuando vivimos situaciones de shock, traumáticas, que no podemos sostener se produce un efecto de olvido y de congelación. EL olvido es mental y la congelación es emocional. Y desde ese momento «todo está bien». Y nos olvidamos de ese daño, dolor interno… Nos congelamos, nos sentimos y vivimos la vida a 0º, ni frío ni calor. Y todo nos resbala y nos parece bien. Hasta que un resorte externo, muchas veces inocente, nos hace estallar y salta por los aires la presunta paz, armonía, tranquilidad. A veces incluso nos inventamos «despertares» o falsas identidades espirituales para obviar esa realidad. 

Estamos aletargados, anestesiados por muchos «deberías de…», «tendrías que…» y lo aceptamos para «sentirnos parte de…» Así vamos cambiando cromos de «ser parte de…», «sentirme aceptada por…» por otros de «insensibilidad», » todo está bien» y el más repetido es el de «no me pasa nada…»

Así que la invitación de este año, es una invitación a la coherencia, a retirar máscaras, y a mandar todo al carajo y sentirte libre de SENTIR lo que ocurre en tu interior, de saber lo que te daña, de poder expresarlo y en un acto de amor propio no tolerarlo más. Y ojo, esto no significa que busques culpables fuera, porque en casi todo lo de nuestra vida es nuestra responsabilidad.

¿Te animas a escribir la carta de tu verdad?

Te leo en los comentarios.

P:D: Ojo, que se cumple !! Te lo digo por experiencia. Y ya puestos, pide también una gran dosis de lo que sea que necesites para sostener este chute de realidad.